Final Fantasy Record Keeper, este era el juego que nos merecíamos los nostálgicos

Square-Enix lleva ya unos cuantos títulos para dispositivos móviles a sus espaldas. Ha tenido algunos aciertos, pocos, y casi siempre ha intentado jugar con nuestra nostalgia para que nos descarguemos sus creaciones. Lleva años haciéndolo y sus estrategias nunca han funcionado: free to play mal integrado, precios desorbitados por remakes de juegos clásicos…

Ellos siguen intentándolo y parece que por fin han dado con la tecla. Su nombre es Final Fantasy Record Keeper y parece el primer intento serio de Square-Enix de hacer un juego free to play sin necesidad de hacernos pasar por caja constantemente para progresar en nuestra aventura. Además, esta vez, ha sabido tocar la fibra de los que hemos amado sus juegos.

A por una experiencia free to play mejor hecha

La historia principal del juego sirve como pretexto para presentarnos todos los mundos de Final Fantasy bajo un universo. En un mundo donde las historias son la clave de todo, unos guardianes se encargan de proteger esos recuerdos (cada Final Fantasy) de una amenaza que aparece de repente. ¿Nuestro objetivo? Evitar que avance y meternos en esos cuadros para luchar.

Una historia un poco boba pero que funciona como excusa para hilar lo más importante: la mecánica. Combates por turnos al más puro estilo Final Fantasy donde podremos realizar diferentes comandos para eliminar a los enemigos que nos vayan apareciendo. El sistema es algo más sencillo y está adaptado para móviles pero la fórmula funciona.

Según vamos ganando combates nuestra experiencia aumenta y podemos subir de nivel, conseguir nuevos personajes o dinero para comprar nuevos objetos. Cada mundo es un juego diferente: enemigos de ese universo, armas, personajes… Aquí han sabido captar al público con una fórmula que funciona, que es divertida y no mal planteada como les pasó con All the Bravest en su día.

El hilo nostálgico está muy bien llevado ya que nos permite añadir personajes clásicos a nuestro equipo. De hecho, uno de los primeros que desbloquearemos es a Cloud de Final Fantasy VII. Sí, a la hora de combatir podremos configurar nuestro equipo con diferentes personajes y armas, como si se tratara de un juego más de la saga.

La diferencia más importante a la hora de luchar la encontramos en cómo se gestiona la magia. En cada combate podremos usar los ataques mágicos una serie de turnos, ni más ni menos. Cada personaje tiene sus propias habilidades y según combatamos conseguiremos una puntuación mayor o menor.

Cada vez que superamos un mapa se desbloqueará otro. El orden está prefijado por el propio juego y no, no sigue la cronología de la saga. Comenzamos en el séptimo juego para, dos misiones más adelante, dar el salto a la cuarta y décima entrega. Bien planteado por otra parte ya que así tenemos algo más de variedad y frescura de primeras.

Visualmente el juego combina bien los elementos de estética moderna con los clásicos sprites de la época de Final Fantasy VI. Una mezcla que funciona y que apela una vez más a nuestros sentimientos. Lo hace bien, sin abusar. Eso sí, hay algunos fallos en los menús pero nada que en la experiencia del día a día se convierta en un problema.

Como decíamos al principio, Record Keeper es un free to play de manual. La descarga y jugar es gratis pero hay algunos elementos que nos costarán dinero virtual. Con él podremos comprar lo que en el juego se denomina como reliquias: objetos especiales que harán que nuestros personajes sean más fuertes.

¿Significa esto que tenemos que pasar por caja para avanzar o que invertir dinero nos dará una ventaja indispensable? Por lo que he jugado hasta ahora Square-Enix ha tratado muy bien este apartado. Podemos pagar, algunas cantidades son algo elevadas, pero no parece que sea obligatorio para superar las diferentes misiones. Veremos en los niveles más altos pero en principio no parece que comprometa la experiencia de uso.

El juego lleva unos cuantos días en Japón y ayer dio un tímido salto en Google Play Canadá para, por fin, debutar hoy en España. Si sois fans de la saga, merece la pena darle una oportunidad porque parece que esta vez sí Square-Enix ha sabido tratar a la saga, y a nosotros los fans, como nos merecemos.