Android tiene un nuevo jefe. Con el ascenso de Sundar Pichai como nuevo CEO de Google se quedaba un hueco importante. Ya sabemos quién será el que tome las riendas de ChromeOS, Chromecast y Android. Su nombre es conocido pero más os vale ir memorizándolo porque seguro que le veremos muchas veces por aquí: Hiroshi Lockheimer.
Lockheimer, para quien no le conozca, entró en Google en 2006 y desde unos años ocupa la posición de vicepresidente de Android. Hace poco hablamos sobre él por partida doble ya que en Reddit resolvió dudas acerca de los nuevos Nexus. Ahora llega el mayor reto de su carrera profesional hasta la fecha: liderar el sistema operativo móvil más utilizado en el mundo.
Pichai ha dejado a un Android encarrillado en una versión bien optimizada y con el lanzamiento de su plataforma de pagos móviles dando sus primeros pasos. En principio nada debería de cambiar a corto plazo: intentar que la adopción de 6.0 sea lo más rápida posible, seguir actualizando y mejorando los servicios de Google y que proyectos como Android One sigan su curso.
Resulta prematuro saber qué rumbo tomará Lockheimer porque hasta ahora su mano no se ha notado mucho en Android. Con Pichai hemos visto que Android se ha vuelto un sistema operativo demasiado orientado a sus propios servicios, giro que le ha servido para buscarse problemas en algunos países como vimos hace poco con Rusia.
Los Nexus seguirán su ritmo como dispositivos de referencia para los fabricantes y objeto de deseo para un pequeño nicho de mercado. Este año hemos visto además que ninguno de los grandes tope de gama ha sido un superventas y los gama media han ido consiguiendo mayor protagonismo. Veremos si ese escenario se repite o si en 2016 los smartphones más potentes vuelven con fuerza.
Android for Work es otro de esos pequeños proyectos que permanecerá con un perfil bajo como vimos hace poco. Pixel C no será el conductor de esta iniciativa y parece que su principal baza será utilizar la base de móviles y tablets ya instalados para expandirse en el mundo profesional.
Habrá que darle tiempo a Lockheimer para ver qué rumbo tomará Android a partir de ahora. Veremos si en los próximos días se produce algo parecido a lo que vimos en su día con Nadella en Microsoft con aquella carta donde mostraba su hoja de ruta.
Vía | Recode
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