¿Os creíais que con Apple y Samsung fumando la pipa de la paz todo sería tranquilidad y sosiego? Pues no, porque aunque los litigios entre los de Cupertino y los coreanos hayan finalizado, esto de las patentes todavía va a dar mucho más juego.
Abran ahora sus apuestas para el resultado de la demanda interpuesta por Nvidia contra Samsung y Qualcomm, proceso que se abre por supuesta infracción de patentes en las GPUs Adreno y Mali que incorporan los chipsets Snapdragon y Exynos respectivamente.
Es el segundo gran juicio en el que se embarca Nvidia tras el que ganaron a Intel en el año 2009, todo ello después de que su división de gráficos variase su modelo de negocio, ahora centrado en la propiedad intelectual y en licenciar el amplio portfolio de patentes que el fabricante de hardware mantiene registradas.
Sin respuestas oficiales de Samsung y Qualcomm, Nvidia sí ha querido afirmar que ha intentado llegar a un acuerdo, pero que ambos fabricantes no estaban por la labor de pagar licencias por las siete patentes infringidas - según Nvidia -, que estarían relacionadas con tecnologías de iluminación, shaders y procesamiento gráfico.
Los chicos de AnandTech han querido explicar las implicaciones técnicas de este problema, que al parecer estarían basadas en las personalizaciones que Samsung y Qualcomm han realizado a sus unidades de proceso gráfico, basadas en ARM (Mali) los primeros y AMD (Imageon) los segundos.
Veremos en qué termina otra batalla más de una guerra de patentes que, en lugar de cerrarse, parece que cada día tiene más contendientes.
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