Recientemente hemos tenido una polémica entre OnePlus 3 y la comunidad, otra más. Pero en esta ocasión el debate generado es bastante interesante pues saca a relucir la disociación entre el gusto de los expertos por la reproducción fiel de los colores en los teléfonos móviles y el gusto general por la saturación de muchos de sus usuarios.
Recapitulando la polémica, a pesar de que a nosotros nos pareció que la pantalla del OnePlus 3 era excelente algunos usuarios y los expertos de AnandTech consideraron que la reproducción del color era muy pobre. Para solucionarlo OnePlus sacó una actualización en la que introducía el espacio de color sRGB que encantó a los que antes habían criticado tanto el terminal.
Sin embargo no todo el mundo está contento. El modo sRGB que tanto gusta a los expertos (y que según mediciones, todo hay que decirlo, reproduce el color de forma muy fiel) no gusta a muchos usuarios que prefieren colores más intensos y saturados.
Pero, ¿qué es el espacio del color?
Cuando nos metemos a hablar de colores realmente estamos entrando en un campo muy técnico. Cuando se hacen fotografías tenemos que casar la realidad con la información digital que obtenemos de ella. Y luego tenemos que reproducirla fielmente, tanto en pantalla como en papel.
Los profesionales traban por tanto con unos monitores especiales, normalmente muy caros, que están especializados en reproducir el color de forma muy fiel, para que al imprimir el resultado case con lo que estaban viendo en pantalla y, claro, con la realidad.
Cuando se captura una fotografía y se almacena se usan distintos espacios de color. Normalmente los monitores de ordenador son capaces de reproducir un espacio de color limitado (es decir, no son capaces de reproducir la realidad fielmente) así que normalmente las fotografías que almacenamos también tienen un espacio de color limitado. Este espacio de color limitado y muy usado se denomina sRGB. Pero existen otros más amplios (quizá el más famoso AdobeRGB) que se usan en fotografía profesional.
Los móviles y los paneles AMOLED
La tecnología AMOLED, usada masivamente por Samsung y a la que muchos se han apuntado, tiene muchas ventajas y algún inconveniente. La principal ventaja es que los negros son muy puros y así logramos un contraste muy alto. Pero tradicionalmente han tenido una desventaja, y es que los colores están excesivamente saturados (es decir, son muy puros, tienen poco gris). Esto con el tiempo se ha ido solucionando y hoy en día los fabricantes son capaces de ofrecer una buena reproducción del color con paneles AMOLED... si quieren.
OnePlus 3 viene con un panel AMOLED de 5,5 pulgadas fullHD. Y en el modo por defecto, el criticado por AnandTech, los colores están muy saturados. Para ellos y muchos otros la reproducción del color es muy importante y que no esté bien calibrado es un error.
Con la última OTA de OnePlus en opciones de desarrollo es posible establecer el espacio de color sRGB y esto hace que la reproducción del color sea mucho más fiel (de hecho lo coloca entre los mejores terminales del mercado en este aspecto, lo cual indica que no era un problema del panel sino de la calibración software). Pero una reproducción fiel del color no gusta a todo el mundo.
Si activamos el modo sRGB efectivamente veremos los colores más apagados (como en la realidad) pero también se nota que los blancos son amarillentos. De hecho el análisis de AnandTech lo dice, el único defecto es que el blanco que tanto predomina en el sistema Android está un poco escorado al rojo.
La polémica está servida
Los foros de OnePlus se han llenado de gente diciendo que no pueden soportar el color amarillento del blanco cuando activan el modo sRGB, que algo debe de estar mal. Y la respuesta de los expertos es la misma: estás tan acostumbrado a los colores saturados y poco fieles que si el blanco se desvía del tono azulado que suele predominar te parece raro. Es cuestión de costumbre, y merece la pena pues las fotos quedan más auténticas.
Yo llevo unos días usando el OnePlus 3 con el modo sRGB y es cierto todo. La primera impresión es que el blanco es amarillo, y que los colores están mucho más apagados. Y también es verdad que al cabo de un tiempo te acostumbras. Pero, ¿qué me gusta más?
Al final es una decisión personal. Los colores saturados tienen su atractivo visual, todo parece más brillante, puro, luminoso. Es como estar en una película de animación. Y sí, cuando visualizas las fotos quizá se pierden matices pero merece la pena. Al menos en mi opinión.
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