Pruebo muchas apps de correo en el móvil, pero Gmail siempre gana por esta razón

La gestión del correo electrónico es una tarea realmente importante en mi día a día, y esto hace necesario tener una aplicación para gestionar los email que funcione a la perfección. Con el paso del tiempo las aplicaciones han ido evolucionando agregando muchas funciones extra más allá de escribir en un cuadro de texto y pulsando en Enviar. Esto hace que sea muy complicado finalmente decidirte por una, aunque yo siempre acabo volviendo a Gmail.

Por suerte, o por desgracia, en la actualidad hay numerosas aplicaciones que prometen gestionar la perfección el email. Y es que pese a ser algo positivo por tener muchas opciones elegir en las diferentes tiendas, tiene como parte negativa que es bastante difícil elegir entre todas estas posibilidades. Y esto hace que sea necesario tomar una decisión de cuál usar, tras probar muchas de ellas, como he hecho yo mismo.

Qué busco en un gestor de email para decantarme por uno de ellos

Al igual que hace cualquier persona que tiene un sentimiento de curiosidad por la tecnología, realiza pruebas de nuevas aplicaciones a diario. Entre ellas entra la de gestionar las cuentas de correo electrónico, para mi vital, para comunicarme laboralmente, académicamente y también para las tareas habituales del día a día, donde el email se ha integrado totalmente.

Es por ello que para mí es realmente importante en este caso que la aplicación sea sobre todo eficiente. Es indispensable que si entra un nuevo correo electrónico en la bandeja me llegue una notificación prácticamente al instante. En mi caso odio tener que estar mirando la bandeja de entrada para saber si me ha llegado una notificación del banco, o un email del trabajo. Siendo esta para mí la prioridad absoluta, después puedo empezar a buscar otras funcionalidades como la programación de emails o la posibilidad de dar marcha atrás.

Spark, Outlook o Canary Mail me han terminado fallando

Como he comentado anteriormente, he probado numerosas aplicaciones para poder gestionar todos los email que me llegan a diario. La primera de ellas, y sin duda una de las que más me han gustado en estos años, ha sido Spark. Sin duda este es un gran referente en lo que respecta a gestores de email, haciéndose un hueco en el gran mercado que hay con competencia como Gmail u Outlook.

Pero la tuve que descartar finalmente tras ir haciendo muchos cambios entre Gmail y Spark debido a que el diseño no me terminaba de convencer. En el caso de Gmail me encanta lo simple que puede llegar a ser la aplicación, pero Spark lo veía todo mucho más sobrecargado. Además, en los últimos meses me generaba errores a la hora de abrir algunos correos electrónicos o para recibir las correspondientes notificaciones. Esto es algo que no me ha ocurrido con Gmail de momento, gracias a que cuenta con un muy buen rendimiento y también diseño.

Pero lo realmente interesante en este caso es la integración con otros servicios. Hay que tener en cuenta que como trabajador, pero también como estudiante, hago uso del ecosistema de la compañía de la gran G. Es cierto que aplicaciones como Spark, Outlook o Canary Mail cuenta con la posibilidad de sincronizar estos servicios, pero el funcionamiento no es tan similar. El hecho de que llegue un email con un archivo adjunto y aparezca automáticamente la opción de subirlo a Drive es algo maravilloso para mí.

En el caso de probar Outlook o Canary Mail, pese a contar con una estética minimalista, sobre todo la segunda de estas, siempre me he sentido atraído por Gmail en el compendio de sus herramientas. Si bien, hay que destacar que en muchas ocasiones se cuentan con características comunes que funcionan realmente bien y para mi son fundamentales como la sincronización de diferentes bandejas de entrada. Pero, sin saber muy bien como definirlo, siempre he terminado volviendo a Gmail gracias a la chispa que puede llegar a tener.

Una interfaz simple y un gran poder de sincronización

Pero lo que de verdad me termina gustando de esta aplicación, como he comentado anteriormente, es su estética. Es realmente simple y minimalista, con un fondo blanco por defecto y que ofrece la información justa. Todos los email se agrupan en una misma bandeja de entrada indiferentemente del dominio original que lo termine ofreciendo. Esto es algo que no todas las aplicaciones pueden decir, que ofrecen características diferentes dependiendo de si el dominio es de Google, Outlook o iCloud. Aquí todas son exactamente iguales.

De esta manera, Gmail cumple con nota mi principal exigencia: la sincronización. Con un simple gesto se van a poder refrescar todos los correos electrónicos, aunque no es necesario, ya que gracias a sus notificaciones push siempre se están sincronizando para ofrecerte los email más importantes que te van llegando.

Estéticamente me encanta que en un simple vistazo se pueda saber si el correo electrónico proviene, es de tipo comercial, notificación o si es de la bandeja de entrada general. Y es que actualmente, en un mundo donde existe una gran cantidad de email que son básicamente publicidad, el tener una inteligencia artificial que los clasifica y te los omite en notificaciones es una auténtica gozada. Porque sí, puedes elegir que únicamente se reciban notificaciones únicamente de los email que sean categorizados como importantes, haciendo que tus notificaciones no sean para nada caóticas.

Y por todo esto acabé con Gmail como gestor principal

Es por ello que tras usar numerosas opciones, regreso finalmente a Gmail tras muchas idas y venidas. Cumple todas mis expectativas en lo que refiere al rendimiento, ya que los correos se notifican al momento indiferentemente del servicio que se utilice. Es decir, en mi caso con servicio de Google, Microsoft y cuentas institucionales como el instituto o la universidad, todas funcionan de la misma manera y se reciben a tiempo las notificaciones. No se "porta bien" únicamente con las cuentas de Google, sino con todas.

Junto a esta capacidad de notificación, se complementan otras funciones realmente interesantes. Al estar dentro del ecosistema de Google en lo que refiere a sus herramientas de ofimática y también su propia nube, Gmail es ideal para trabajar de manera conjunta con todas estas en sincronización. Todo esto acompañado de una muy buena estética y un sistema de acciones rápidas a través de gestos.

Eso sí, cumple con algunas similitudes con otros servicios de gestión de correos electrónico. Por ejemplo, agrega la opción de programar el envío de diferentes correos y también tiene una bandeja de entrada inteligente que agrupa todos los correos y los clasifica dependiendo de su categoría (notificación, publicidad...). Para mí, se ha convertido en una herramienta que es insustituible, aunque lo he intentado en numerosas ocasiones.