Samsung quiere borrar lo antes posible la que sería la mancha más oscura de su expediente de este 2016 que ya está acabando, y es que está intentando que todos los Galaxy Note 7 sean devueltos lo antes posible y evitar cualquier problema derivado de su batería a aquellos que lo compraron en su día.
Para "animar" a aquellos que se resisten a devolverlo, el fabricante coreano ha estado liberando actualizaciones limitando la capacidad de la batería, así como animar a las diferentes operadoras a que bloqueen este modelo de terminal. Por ahora todas estas medidas han llevado a que 2,7 millones de teléfonos de los 3,06 millones que se han vendido hayan sido devueltos.
Si bien en su propia casa, Corea del Sur, "sólo" un 80% de los dispositivos han sido devueltos, en mercados como el norteamericano y el europeo la cantidad de Note 7 devueltos asciende al 90%. En Europa se espera que la semana que viene llegue una actualización que limite la capacidad de la batería al 30%.
Alrededor de las mismas fechas a Estados Unidos llegaría la actualización que, directamente, hace que el terminal no pueda cargar. De momento no se sabe si esta actualización llegará a Europa o, de hacerlo, cuándo pasará, pero está claro que Samsung quiere olvidarse del Note 7 y seguir adelante.
Vía | SammobileEn Xataka Android | ¿Es el diseño "agresivo" del Note 7 el causante de que su batería explote?
Ver 5 comentarios