Durante la primera jornada del MWC 2012, Motorola ha presentado uno de los terminales más resistentes del mercado, el nuevo Motorola Defy Mini. La compañía sigue insistiendo en terminales robustos que superen las condiciones más adversas.
El Motorola Defy Mini es el terminal ideal para los deportistas que quieran llevar consigo un teléfono relativamente potente a la par que resistente. Su tamaño no demasiado grande lo hace perfecto para llevarlo en cualquier lugar.
Siendo un teléfono todoterreno aguanta, al igual que sus hermanos: caídas al suelo o ser sumergido sin problemas. Pero, ojo, no es un terminal para hacer submarinismo ni para inmersiones profunda, más bien para aguantar carreras en la piscina, bajo la lluvia o incluso bajo la ducha.
Es un terminal relativamente ligero con un peso de 107 gramos y un grosor de 12.55 mm. Su pantalla tiene 3.2 pulgada y una resolución de 480 × 320. Un punto a favor para salir con él de ruta es su batería de 1650 mAh que promete autonomía ya que no es un gran consumidor de la misma con su procesado algo escaso de 600MHz y 512 MB de la RAM.
La pantalla está recubierta de Corning Gorilla Glass a prueba de arañazos, material que se está haciendo habitual en los terminales que saca Motorola al mercado haciéndolos bastante resistentes. El Motorola Razr también dispone de la misma tecnología, añadiendo Kevlar en el cuerpo.
Con el resto de características hay pocas novedades, Dispone de 3 megapíxeles de cámara y vendrá con Android 2.3.6. No sabemos si tiene planes para llegar a alcanzar Ice Cream Sandwich.
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