Realme 9 4G, análisis: un competido gama media que renuncia al 5G en favor del precio

No hace mucho que se presentó oficialmente el Realme 9, disponible en versiones 4G y 5G. Sin embargo, su disponibilidad estaba acotada a India. Este dispositivo ya se puede comprar en España y otros países, por lo que en Xataka Android no podíamos resistirnos a probarlo y en este post te traemos una review completa con nuestra experiencia de uso del modelo con 4G.

Este dispositivo destaca especialmente por una cámara principal de 108 Megapíxeles, incorporar un Snapdragon 680 o una capa de personalización de Realme basada en Android 12. Aunque de primeras lo más destacado es su color, por lo que de inicio se nos ocurre plantear la siguiente duda metaforica, ¿encontraremos El Dorado con este Realme 9 4G?

Ficha técnica del Realme 9 4G

Un diseño hecho a medida para el consumo multimedia

Al hilo de la introducción y el color dorado en el que se ofrece este smartphone, al menos en la versión a la que hemos podido acceder, nos llama la atención como en realidad tiende a ofrecer un gradiente de color a caballo entre el dorado y el amarillo. En lo personal es mi color favorito, por lo que quizás peco de ser poco objetivo en ello, aunque sí tengo aspectos a destacar en los que todos podremos estar de acuerdo.

Es un dispositivo con el que no se adhieren las huellas con facilidad y por ello se puede disfrutar mucho sin funda. No es el único del mercado en tener esta característica, pero cada vez vemos más móviles económicos como este con materiales que llaman a la suciedad con solo mirarlos, por lo que es de agradecer que en este no. Por lo demás, ofrece un tamaño muy compacto pese a sus dimensiones, destacando especialmente su ligero peso.

Bajo un protector ya instalado de fábrica, encontramos un panel AMOLED, configurable en 60 o 90 Hz, así como una versión automática para optimizar la batería, se ve muy bien. Cierto es que llega a saturar un poco los colores, pero no es nada exagerado y se hace muy apetecible para disfrutar de contenido en vídeo. Eso sí, algo pasa con el brillo automático. No sabemos si por una mala implementación del sensor de luz o la falta de una actualización de software, pero tiende a ofrecer un brillo excesivamente bajo en todo tipo de situaciones, por lo que es más práctico configurarlo en manual e ir ajustándolo nosotros. En estos casos, ofrece un buen brillo en prácticamente cualquier situación.

Cuando hablamos de sonido, nos volvemos a encontrar con un apartado en el que muchos fabricantes flojean y es el de ofrecer un altavoz estéreo y decente en este tipo de rangos. No esperamos el mejor sistema de sonido, obviamente, pero el único altavoz que incorpora se antoja insuficiente. Y ya no porque le reste puntos a la experiencia multimedia, sino porque además tiende a dar la sensación de escuchar el audio enlatado. Así que, para según que situación, es casi obligado recurrir al uso de auriculares.

Decepcionante en rendimiento, aunque con muy buena autonomía

El Helio G95 de Mediatek del Realme 8 no es que fuese mal, pero tenía puntos por mejorar. Y no es que esperásemos que su sustituto de Qualcomm fuese a convertirlo en un avión, pero lo cierto es que el Snapdragon 680 de este Realme 9 4G nos ha dejado un sabor muy agridulce (más agrio que dulce).

El dispositivo se nota lento con relativa facilidad. No es que sea tampoco una constante, pero a menudo vemos como ni siquiera los 90 Hz de la pantalla permite que se sienta fluido en acciones tan cotidianas y sencillas como navegar por el sistema. Y por no hablar de cuando le exigimos un poco, ya que ahí además se calienta y ralentiza mucho el resto de procesos. Sin ir más lejos, en la prueba de rendimiento de 3D Mark se quedó bloqueado y hubo que forzar su reinicio.

Realme nos ha confirmado que el dispositivo recibirá una actualización con corrección de errores próximamente. Sin embargo, en el momento de realización de este análisis, todavía no la hemos recibido, por lo que no podemos valorar si surtirá efecto y corregirá problemas como los anteriormente mencionados.

Aquí puedes ver su puntuación de benchmark comparado con otros móviles de similares especificaciones:

Por desgracia, el asunto no mejora si hablamos de su lector de huellas. Está muy bien ubicado en la pantalla y aunque sea un poco lento en su reconocimiento, es algo esperable en este rango de precio y que tampoco vemos un aspecto muy negativo. Sin embargo, falla en el reconocimiento demasiado a menudo, algo que solo pudimos paliar en cierta medida configurando dos veces una misma huella.

En lo que a software se refiere, monta un Realme UI 3.0 basado en Android 12. Es de agradecer esta capa de personalización porque, pese a no ser un Android puro, no viene cargado de bloatware. A lo sumo alguna que otra app preinstalada, pero que se identifican fácil y no empañan una interfaz muy similar a la que se puede tener en terminales que si monten el sistema de Google sin añadidos.

En lo que a autonomía se refiere, nos hemos llevado una grata sorpresa. Incluso con 90 Hz activos llega con batería a la noche, aunque dependiendo del uso. Con un uso cotidiano (vídeo, redes sociales, navegación llamadas, juegos casuales...) se nos apagó llegando a las 21.30h (desde las 7.00h). Sin embargo, mejora mucho el asunto con el modo automático o el de 60 Hz, llegando a las 23.00 (desde las 7.00h) con un 14% de batería en un idéntico uso con 7 horas y media de pantalla. Si el uso es más intensivo y exigente, a duras penas llega a las 22.00h con los 60 Hz o el modo automático.

Sus tiempos de carga, con su adaptador de 33 W incluido en la caja, no son malos. De hecho, en 15 minutos ya nos da casi un 30% de batería. Aunque esto tampoco quiere decir que sea de las mejores cargas del mercado ni mucho menos, tardando alrededor de una hora y cuarto para realizar una carga completa de 0 a 100% como puedes ver en este resumen:

• 10 minutos: 19%
• 15 minutos: 27%
• 30 minutos: 49%
• 40 minutos: 63%
• 50 minutos: 77%
• 60 minutos (1 hora): 90%
• Total: 1 hora y 13 minutos

Cumple su cometido en cámaras, excepto de noche

Este Realme 9 4G ofrece una de las app de cámara más completa en su rango de precios. Al menos en lo que a modalidades se refiere, teniendo un acceso rápido a todos sus modos clásicos (foto, vídeo, modo noche), además de modalidades "especiales" del dispositivo como es el modo calle pensado para captar mejores resultados en exteriores, el modo 108M creado para las fotografías en su máxima resolución y la opción de acceder a más ajustes e incluso un modo pro desde el panel "Más".

De los resultados en sí, ya te adelantamos que hemos quedado bastante satisfechos en líneas generales. No hay algo tan brillante con lo que llevarnos las manos a la cabeza, como es esperable en este rango de precios, aunque sí con alguna que otra decepción que es impropia incluso cuando estamos hablando de un móvil ecónomico. Dicho esto, veamos algunos ejemplos.

Seguramente podrías pensar que estas dos fotografías están hechas con diferentes móviles e incluso diferentes estaciones del año. Pues palabrita de Xataka que no. Son dos instantáneas tomadas con el mismo Realme 9 4G y con solo un par de segundos de diferencia, lo justo para cambiar de una lente a otra. Como puedes apreciar, parecen dos cámaras totalmente distintas por la inmensa variación de color que encontramos entre una y otra. Sorprendentemente, la de mayor angular capta una imagen mucho más fiel a la realidad en cuanto a color, aunque pierde excesivo detalle cuando nos acercamos al horizonte. La principal, por el contrario, mantiene un nivel de detalle mayor pese a sus colores más frios.

Como extra, esta fotografía fue hecha con el zoom digital del dispositivo. En ausencia de teleobjetivo que ofrezca zoom óptico es esperable encontrarse con un resultado tan movido como el que vemos. Sin embargo, no es tan malo el detalle que es capaz de mostrar. Eso sí, nuestra amiga la cigüeña se cansó de ser modelo y se quedó en una postura muy rara antes de echar el vuelo unos segundos después.

Tras varias pruebas de lentes macro en este tipo de gamas, llegamos a la clara conclusión de lo que es una gran idea con una mala ejecución. Aunque en este caso concreto no es tan mala como cabría esperar, por lo que se sale en cierto modo de esa dinámica. Cuesta colocar el enfoque donde lo queremos y pierde detalle al ampliar, pero ofrece una vista previa bastante bonita tanto para ejemplos como este, como para fotografías flores u otros elementos que queramos mostrar con amplitud.

Que un servidor se olvidase de haberse hecho las cejas al momento de la captura nos sirve para apreciar varias cosas de la cámara delantera. Como punto positivo está que ampliando podemos apreciar perfectamente esos pelillos del entrecejo. Sin embargo, como punto contrario y más apreciable en la ampliación del ojo, ofrece un resultado muy rudioso. No obstante, al no esperar tampoco maravillas de esta lente, nos quedamos con que ofrece fotografías muy luminosas con un color natural en el que no satura ni se muestra tan frío como en la lente trasera principal.

La simpática Lucy es la modelo canina de esta fotografía y nos sirve para volver a la cámara trasera y enfocarnos en el modo retrato. Como verás, no hemos destacado ningún detalle de la misma por el excelente recorte que hace este Realme 9 4G en esta modalidad. Ofrece un buen grado de detalle a nivel general y sabe interpretar perfectamente la diferencia entre la cabeza del animal como foco principal, ofreciendo un degradado de desenfoque en el resto del cuerpo, que a su vez está más enfocado que el paisaje. De 10 en este apartado, y más viendo que móviles de más alta gama pinchan claramente en este ámbito.

Por desgracia, el buen retrato de la cámara principal no se traslada al de la cámara frontal. Observamos un buen nivel de desenfoque en líneas generales, pero suspende claramente en el recorte. Esta es solo una de las varias intentonas que hice y no logré que el dispositivo pudiese diferenciar gran parte de mi pelo del fondo. Como ves en la ampliación, ni siquiera fue capaz de reconocer la oreja como parte del foco.

Ni tanto, ni tan calvo. Muchos móviles de esta gama pecan de exagerar a sobremanera la luminosidad en el modo noche hasta el punto de ofrecer resultados completamente irreales. El Realme 9 4G se va al otro extremo, arrojando un resultado en el que apenas se nota un cambio con el modo nocturno activado. La luminosidad extra que se añade es muy escasa y eso que había alguna que otra farola en el lugar que podría haber ayudado a mejorar la fotografía. De esta forma, se obtiene unos resultados malos, plagados de ruido y casi totalmente desenfocados.

Si vemos el modo noche con la cámara frontal, la cosa mejora a nivel de iluminación, ya que en este caso se cuenta con la luz blanca que emite la pantalla durante la captura de imágen. Ahora bien, el resultado es malo también. Sigue arrojando exceso de ruido y falta mucha precisión en el detalle.

A continuación puedes acceder a una galería con más ejemplos de lo que es este Realme 9 4G en el terreno fotográfico.

A modo de conclusión, decir que resulta positiva la versatilidad de la cámara en lo referente a modalidades. Sin embargo, peca de ofrecer resultados muy líneales en cuanto a color, con una considerable diferencia entre la lente principal y la ultra gran angular. Le falta brillar mucho más, literalmente, en el modo noche. Sin embargo, hay aspectos positivos a destacar como su modo macro de notable (bajo, pero notable) o un modo retrato que realiza muy bien el desenfoque si se realiza con las cámaras principales.

Realme 9 4G, la opinión de Xataka Android

Vistas nuestras pruebas, y en referencia a la pregunta con la que introducíamos esta review, podemos ya decir que no hemos encontrado El Dorado con este Realme 9 4G. Ahora bien, volvemos a recalcar que es una unidad de prueba y que le quedan algunas actualizaciones que, previsiblemente, mejorarán su rendimiento.

En cualquier caso, debemos decir que tampoco es este un dispositivo enfocado a público muy exigente. Cumple a regañadientes con juegos o tareas algo más pesadas, pero destaca sobre todo en un uso más calmado. Es un terminal muy interesante para aquellos que busquen un móvil económico y polivalente, con unas cámaras de notable (raspado, pero notable). Comparándolo con otros terminales de su rango, es una buena alternativa a aquellos que vienen cargados de bloatware, ya que cuenta con un software que acerca mucho la experiencia al Android más puro.