No siempre nos encontramos juegos para móviles con personalidad, si bien nos encontramos casos como Angry Birds como caso de éxito, no muchos consiguen dar ese toque de originalidad que muchos queremos. Esta vez nos hemos encontrado con uno de esos juegos que son una pequeñas joyas con unos personajes muy carismáticos, se trata de Devil’s Attorney.
En este hilarante y original juego nos ponemos en la piel de Max McMann, un abogado novel sin el más mínimo escrúpulo y con un respeto al prójimo que se puede clasificar de sociópata. Como abogado defensor tiene que representar a clientes de todo tipo con una particularidad común: sus casos son estrambótico hasta límites insospechados.
Destacan casos como el del prestidigitador que hace desaparecer cosas sin hacerlas reaparecer o el de mantener un jaguar en un apartamento aludiendo que es un gato muy grande. Este juego, aunque no lo parezca, se juega al más puro estilo RPG, enfrentándonos a pruebas y testigos, cada uno eliminando credibilidad a nuestro cliente.
Deberemos desestimar cada prueba y testigo para declarar a nuestro cliente como “no culpable“, y para ello dispondremos de acciones que restan credibilidad a nuestro rival, redice el daño que hacen y varios efectos más. Deberemos usar con conciencia cada acción para que nuestro cliente no sea declarado culpable, y si somos rápidos en el juicio, nuestro cliente nos pagará más.
Nuestras habilidades se desbloquean según vayamos mejorando nuestro apartamento usando el dinero que ganemos en los juicios, y cada objeto nos aumenta una de las tres características, que son el materialismo, la decadencia y la vanidad, cada uno otorgando unas habilidades.
El punto fuerte del juego son los diálogos, que a pesar de estar en inglés, consiguen sacarnos unas carcajadas con un humor soez y sórdido lleno de descalificaciones. La gran pega es que el juego es corto, pero los desarrolladores aseguran que irán añadiendo contenido progresivamente, con lo que es un juego muy recomendado.
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