Como suele ocurrir en los lanzamientos de móviles, al menos en las gamas de mayor importancia, Huawei se encontraría en preparación de su próximo gran smartphone, el posible Huawei Mate 40. Eso sí, este año seguramente se retrase más de lo que al fabricante le gustaría: la marca tendría serias dificultades para abastecerse de componentes debido al veto de Estados Unidos.
Huawei no tuvo un 2019 sencillo en sus principales vías de negocio: las infraestructuras móviles y la fabricación de smartphones sufrieron un duro varapalo tras el veto comercial de Estados Unidos. Y no es que 2020 haya comenzado mejor para la empresa ya que las sucesivas prórrogas del veto han hecho que Huawei se vea incapacitada para fabricar los procesadores de sus dispositivos. Sería este uno de los motivos por el que la gama clave para la marca, la gama Mate, se vería retrasada este año.
Huawei anticiparía problemas de suministro en el próximo Mate
El fabricante chino no pasa por sus mejores momentos en términos de fabricación ya que todos los recursos que utilicen tecnología estadounidense le quedan vetados de sus cadenas de suministro. En principio la empresa habría hecho acopio de algunos componentes, como procesadores, pero no podría asegurar la construcción a tiempo del próximo Huawei Mate, en principio con la numeración 40 si sigue la tendencia marcada por los Huawei P40.
Según detalla el diario Nikkei Asian Review, y siempre citando fuentes cercanas a la cadena de suministros de Huawei, la marca china habría comentado con sus proveedores que espera cortes en la distribución de ciertos componentes. Huawei no puede contar con TSMC para la fabricación de su próximo procesador Kirin, un SoC que, recordemos, tiende a estrenar cada año el Huawei Mate de turno. Según Nikkei Asian Review, Huawei habría retrasado la fabricación en masa de su próximo móvil Mate al menos en uno o dos meses. Esto podría dar al traste con los planes de distribución ya que lo más seguro es que no llegue a tiempo para la campaña navideña. La fecha de presentación no tendría por qué retrasarse.
Huawei estaría verificando su inventario de SoCs móviles HiSilicon así como valorando si puede colaborar con otros fabricantes de chips, como MediaTek o Qualcomm. Se encuentra en una posición delicada ya que la marca no cuenta con plantas de fabricación para sus Kirin, una tarea que delegaba en TSMC.
Vía | Nikkei Asian Review