Dentro de la competición por ver quién fabrica el mejor smartphone, si hay un punto donde todas sus marcas dan lo mejor de su tecnología, ese es sin duda el apartado fotográfico. HTC ya lo demostró el año pasado con su HTC One X y este año viene con ganas de más.
Y es que mientras todos parecen querer subirse a los fantásticos sensores retroiluminados de 13 megapíxels Sony, HTC optaría en su M7 por una matriz un tanto menos convencional, formada por lo que han llamado Ultrapixels.
El truco está en superponer en tres capas sensores de 4.3 megapíxels, cada uno funcionando en un canal de color distinto, según Pocket-Lint. Esto, por supuesto, no resultaría en una imagen final de 3 x 4.3 = 12.9 megapíxels, puesto que lo que tenemos en realidad es cada pixel con 3 subpíxels en profundidad.
La diferencia estaría en que se conseguiría una mayor definición en el color, pues cada píxel absorbe la luz en un área bastante más grande, dando lugar a colores más nítidos y una resolución final - en tamaño - más baja, aunque de mayor calidad y de mejor rendimiento en condiciones de baja luminosidad.
A fin de cuentas, este nuevo palabro de 'Ultrapíxels', sería una forma de venderle al usuario final sensores de 4.3 megapíxels sin que esto le suponga la percepción de una cámara de menor calidad, sino con una tecnología más avanzada.
Esta nueva característica, de confirmarse, no dudéis ni por un segundo que HTC la utilizará como una característica principal en su teléfono, que será presentado el 19 de febrero en Nueva York si todo sigue según lo previsto.
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