Eva R. de Luis
Editor SeniorMe encanta jugar con mis sobris y aunque tienen un montón de juguetes, es bastante común que acabemos inventando algún juego o usando algunos de sus cacharros para una utilidad completamente diferente. Sin embargo, en uno de nuestros últimos encuentros estábamos en mi casa, donde no hay muchos juguetes precisamente y sí mucha tecnología. No obstante, quien tiene un móvil viejo, tiene un tesoro: aquí tienes una larga de ideas para reciclarlo.
Por mi trabajo tengo algún Motorola y OnePlus de hace un par de años, además de terminales de la familia que ya no usamos pero que siguen completamente operativos de Xiaomi y que nos servían perfectamente para esta misión: hacernos nuestros propios walkie talkie.
Si tienes un móvil viejo, tienes un walkie talkie
Con que el móvil funcione, tenga el micrófono y altavoz en buen estado (esencial para este pequeño proyecto DIY) y un poco de batería para aguantar el juego basta. A partir de aquí, hay varias aplicaciones gratis de walkie talkie: me llamaba TenTen, pero la app estaba saturada cuando probé, así que busqué una alternativa fácil de usar y la encontré.
Se llama Two Way, está disponible gratis en Google Play Store y aunque tiene algún que otro anuncio que apenas molesta, lo que más me gustó es que no hace falta ni crearse una cuenta para usarla. Te la bajas y poco más. Tras aceptar permisos lógicos como el acceso al micrófono, te encuentras con una interfaz como la que ves bajo estas líneas y que para peques es tan fácil de explicar como: tocas sobre el botón gordo y hablas.
No recopila información personal aunque lo que digas queda al alcance de quien esté en el canal, por lo que si lo usas con menores, mejor siempre con supervisión. Cuando el botón tiene la circunferencia en blanco solo escuchas lo que hay en el canal y si lo pulsas suena un pitido, la circunferencia se convierte en verde y ya puedes hablar. La interfaz es simple a más no poder, al estilo de los walkie talkie de juguete pero reciclando dos móviles viejos.
Eso sí, que sea tan básica tiene sus limitaciones: puedes elegir un canal en abierto donde comunicarte con quien esté conectado en una especie de interfaz de calculadora o en un mapa, pero no tiene canales privados y si lo usas en varias sesiones, conviene ir comprobando que el canal no se ha cambiado. Pero si lo usas para juguetear un rato cumple más que de sobra. Además, si se queda funcionando en segundo plano apenas gasta batería y puede apagarse dentro de la app, si bien en mi caso prefiero salir y listo.
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Portada | Foto de Sincerely Media en Unsplash, Amazon y Mockuphone
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