Noelia Hontoria
Editora“No te escucho bien”. Es posible que te hayan dicho esta frase cuando intentas hablar con alguien por teléfono. Si pasa de manera esporádica, puede ser un problema puntual de mala cobertura o incluso que no funcionan los auriculares Bluetooth de la otra persona. Sin embargo, si se repite continuamente empieza a sospechar: el micrófono de tu móvil no funciona bien.
Esto puede ocurrir por diferentes motivos, pero el más cotidiano es por suciedad. A fin de cuentas, el micrófono de los terminales no deja de ser un orificio que está expuesto a polvo, humedad, entre otros.
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Por suerte, es algo que suele tener una solución bastante sencilla. El primer paso es identificar que realmente se trata de suciedad y no hay otro problema subyacente. El segundo, ponerse manos a la obra y eliminar aquello que esté taponando el micrófono. Limpiar el móvil es fundamental para que funcione siempre perfectamente.
Cómo saber si el micrófono no funciona bien
Aunque el primer impulso puede ser llamar a alguien y preguntar si nos escucha bien, hay algo todavía más sencillo: haz una grabación de tu voz. La grabadora de voz es una de las herramientas que suelen venir preinstaladas en la mayoría de los móviles. Te recomendamos hacer una doble prueba. Primero, grábate con el micrófono del teléfono, quitando la funda a tu teléfono para que nada pueda bloquear el sonido; después, grábate a través de unos auriculares o un micrófono externo.
De esta manera, podrás comparar ambas grabaciones y ver si realmente hay una diferencia sustancial entre uno y otro.
En caso de que notes tu voz distorsionada, con un volumen mucho más bajo de lo normal o con un “efecto túnel” en la grabación del micrófono del móvil, significa que existe algún problema con el micrófono. Lo más habitual es que se trate de un fallo puntual que se puede solucionar con un simple reinicio del teléfono o que haya suciedad en él. Te contamos cómo limpiarlo.
Cómo limpiarlo
La forma más rápida y sencilla es simplemente soplar un par de veces directamente en el agujero, para permitir que salga el posible polvo que puede haberse quedado en su interior. Si tienes un pequeño spray de aire comprimido en casa (por ejemplo, este de Amazon te puede servir), también puedes usarlo, pero siempre con baja potencia, ya que aplicar demasiada fuerza puede ser contraproducente. Para los casos más leves esto puede ser suficiente. Incluso, puedes animarte a usar el truco de la pajita.
Sin embargo, si llevas mucho tiempo sin limpiar el micrófono o si continúa dando un mal comportamiento, te recomendamos pasar al siguiente paso. Nuestra opción favorita es utilizar un poco de cinta adhesiva (la de oficina o la de pintor pueden servir). Pégala sobre el orificio del micrófono (también puedes aprovechar para limpiar los altavoces con el mismo método) y con la herramienta de extracción de SIM, un palillo de dientes o un clip introdúcela ligeramente y con cuidado en los agujeros. A continuación, retira la cinta suavemente (nada de pegar un tirón) y listo.
Como sustituto a la cinta adhesiva, puedes usar masilla adhesiva tipo Bluetack. Es un método un poco más potente, pero tienes que tener más cuidado para que no se quede ningún residuo dentro de los agujeros.
Una cuarta alternativa que también puedes probar es utilizando un cepillito de cerdas suaves y flexibles. Esto suele ser más eficaz para limpiar el puerto de carga, ya que es más grande que el orificio del micrófono, pero por probar no pierdes nada.
Sobre todo, recuerda que el micrófono es un elemento muy sensible, por lo que tienes que tener cuidado de no arañarlo. Nunca introduzcas directamente un objeto punzante como palillos o clips, ya que podrías romperlo.
¿Y si nada de esto funciona?
En ese caso, es posible que el problema no sea la suciedad. Si el móvil se ha mojado recientemente, se ha llevado un golpe fuerte o si se ha arañado el micrófono (en algunos modelos el micrófono está junto a la ranura de la SIM y puedes introducir sin querer el pincho en el agujero equivocado), entonces es posible que la pieza esté estropeada.
La solución en este caso pasa por llevarlo a reparar, pero si no te lo cubre la garantía o no quieres recurrir a esto, una solución de compromiso es utilizar unos auriculares con micrófono para seguir usando tu móvil como el primer día.
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