Ya ha pasado una semana desde que Google anunció por todo lo alto la nueva versión de su sistema operativo para dispositivos móviles Android 8.0 Oreo, una actualización mayor llena de importantes novedades y mejoras.
En todo este tiempo hemos estado probando a fondo Android 8.0 Oreo para traeros nuestras primeras impresiones de todas novedades que hacen más inteligente, rápido y potente al sistema operativo.
Más rápido y fluido
Cada vez que Google lanza una nueva versión de Android siempre esperamos mejoras de rendimiento, y Oreo no iba a ser menos. Android 8.0 mejora la velocidad de arranque de sistema para que enseguida estemos ya usando nuestro móvil. El sistema arranca hasta dos veces más rápido. En el Nexus 6P si que se notado esa mejoría, el dispositivo enciendo unos segundos más rápido.
Android Oreo también ayuda a minimizar el uso excesivo de procesador y de la batería por parte de aplicaciones que se ejecutan en segundo plano. El sistema minimizará la actividad de aquellas aplicaciones que apenas usas para no afectar a la fluidez y batería. Esta mejora se notará sobretodo en dispositivos de gama baja. En un dispositivo de gama alta no he notado una mejora sustancial respecto a Nougat.
Una mejor forma de hacer dos cosas a la vez
El modo Imagen en imagen (PiP) tiene todas las papeletas para convertirse en la novedad de Android Oreo más usada por lo práctica y fácil que es de usar. El modo PiP nos ofrece una nueva forma de poder hacer dos cosas a la vez sin tener que recurrir a la pantalla dividida estrenada el pasado año con Nougat.
Ahora podremos ver videollamadas y vídeos en una ventana flotante mientras seguimos usando otras aplicaciones a pantalla completa. Ya no tendremos que dividir la pantalla en dos pequeñas pantallas en la que apenas veíamos información y teníamos que estar todo el rato haciendo desplazamientos.
Actualmente muy pocas aplicaciones soportan el modo PiP, ni siquiera todas las de Google como YouTube, pero en las pocas aplicaciones compatibles como Google Duo o Chrome funciona muy bien ese nuevo modo de pantalla dividida. Yo ya estoy usándolo más que el modo de pantalla dividida al ser más rápido y mostrar las aplicaciones a pantalla completa y encima una ventana flotante con el vídeo o videollamada.
Organización en su nueva barra de notificaciones
Con cada nueva actualización de Android también llegan mejoras en su sistema de notificaciones, y con Android Oreo llega su renovación más importante, estrenando una nueva jerarquía para organizar las notificaciones y un nuevo diseño más visual, con unaa nueva transición que va desplegando poco a poco las notificaciones a medida vamos bajando su barra de notificaciones. El efecto es muy llamativo.
Las notificaciones ya no se mostrarán en el orden de llegada, sino que ahora cada tipo de notificación tendrá su espacio reservado. Primero veremos las notificaciones en curso (llamada, temporizador, reproductor, etc...). Luego veremos las notificaciones enviadas de persona a persona (mensajes, llamadas perdidas, etc...). Luego vendrán las notificaciones generales (recordatorios, eventos, actualizaciones, etc...) y por último, las notificaciones menos importantes, las de tipo "Por cierto..." (tiempo, tráfico, promociones, sugerencias, etc...).
Esta nueva jerarquía en la organización de las notificaciones convence, ya que así las notificaciones de persona a persona estarán siempre en las primeras posiciones, y no se perderán o aparecerán mezcladas con las notificaciones de actualizaciones o recordatorios.
Mayor control en las notificaciones
Los canales de notificación es otra gran idea de Google. Gracias a ella tendremos más control en cada una de las notificaciones que recibimos en nuestro dispositivo. Hasta ahora sólo podríamos decir al sistema que bloqueará todas las notificaciones de una aplicación. Ahora con Oreo podremos decir que tipo (categoría) de notificación queremos dejar de ver, sin tener que entrar en los ajustes de la aplicación. Todo un acierto. Google centraliza la gestión de cada tipo de notificación desde los ajustes del sistema.
Cada aplicación creará sus propias categorías de notificación. Cuando nos llegue una notificación con una pulsación prolongada podremos decirle al sistema que nos deje de enviar notificaciones de este tipo. Por ejemplo, si Google nos informa de la cotización podremos decirle que deje de enviarnos más notificaciones de las acciones con una simple pulsación prolongada sobre dicha notificación.
Android Oreo también te da más control sobre las notificaciones con su nueva opción posponer. Ahora si recibes una notificación podrás desplazarla ligeramente para acceder a la nueva opción posponer, la cual nos permite volver a mostrar esa notificación en 15m, 30m, 1h o 2 h. Esta novedad me temo que no será muy exprimida por los usuarios, ya que en casos muy excepcionales nos va a interesar posponer una notificación, pero aún así se agradece que Google haya añadido la posibilidad.
Otra forma de ver las notificaciones
Continuando con las notificaciones, Android Oreo añade soporte oficial a los globos de notificación que iOS popularizó y que otros fabricantes implementaron en sus personalizaciones. Esta novedad dependerá del lanzador de aplicaciones que tengamos instalado. Si tienes un Nexus 5X o 6P tendrás que instalar el Pixel Launcher. Si una aplicación tiene una notificación te lo mostrará con un punto y con una pulsación prolongada podrás ver dicha notificación. Para mi esta es la novedad más imprescindible, ya que creo que con la barra de notificaciones sobra.
A por la normalización de los iconos
Desde que Google lanzó Android en 2008 siempre se le ha criticado la falta de normalización en el diseño de los iconos. Los desarrolladores tenían vía libre para poner las formas y tamaños que quisieran, lo que provocaba que no hubiese armonía en el cajón de aplicaciones. Ahora con Oreo llegan los nuevos iconos adaptativos, que adaptan su forma a una máscara de recorte ofrecida por el lanzador de aplicaciones/fabricante.
Visualmente el cajón de aplicaciones de Android mejora con estos nuevos iconos adataptivos, pero Google debería de haber forzado a normalizar todos los iconos y no depender a que el fabricante añada soporte.
Diseño acertado en sus nuevos emojis
Otro cambio en el diseño lo encontramos en los nuevos emojis, que se despiden de ese diseño de gota de agua para ofrecer un diseño más clásico y más similar a los emojis de iOS/WhatsApp, pero su novedad más importante es que estos nuevos emojis también llegarán a las versiones antiguas de Android. Aunque pierdan personalidad, es un cambio que necesitan los emojis de Android, ya que antes costaba reconocer a los emojis.
Más inteligente
Con Android Oreo será más fácil y rápido iniciar sesión o registrarte en las aplicaciones. El sistema operativo se integra con el Autocompletado de Google, el mismo que llevamos años usando en Chrome y el cual nos recuerda nuestras cuentas, contraseñas y datos. Estamos ante una importante novedad que nos evitará teclear o recordar con que cuenta o contraseña nos registramos en una aplicación.
También el nuevo selector de texto inteligente nos facilita la vida. Ahora es mucho más sencillo seleccionar textos de nombres, direcciones, teléfonos, correos y sitios webs. Con tan sólo una pulsación prolongada o doble pulsación se seleccionará el texto y en su acción contextual nos mostrará con que aplicación abrirlo. Por ejemplo, si seleccionamos el texto de una dirección nos mostrará un acceso para abrirla con Google Maps. El Autocompletado de Google y selector de texto inteligente nos ahorrarán mucho tiempo.
Una reorganización en sus ajustes que no termina de convencer
Android Oreo rediseña y reorganiza los ajustes del sistema para que sean más fáciles de usar. Ahora los ajustes muestra menos secciones en la pantalla principal y quién lleve muchos años usando Android este cambio le parecerá un poco lioso, porque tendrá que volver a aprender dónde está cada ajuste, pero a los días ya se acostumbrará a la nueva organización. Muchas opciones han cambiado de lugar.
Lo que más me gusta es que ahora todas las opciones se muestran en pantalla. No tendrá que acceder al Menú o al icono del engranaje para acceder a los ajustes avanzados. Ahora aparecen todos en en desplegables.
Lo único que no me gusta, y me chirría un poco, es la nueva ubicación del apartado Movimientos (Gestos), que ahora están en Sistema > Idiomas e introducción de texto > Opciones avanzadas. No entiendo que tienen que ver los gestos de la cámara y del sensor de huellas con los idiomas e introducción de texto... Yo hubiese conservado la sección propia de Movimientos.
Mayor seguridad
Con Android Oreo se tiene mayor sensación de seguridad, de tener más controlado lo que se instala y lo que hacen las aplicaciones. Ahora hay un nuevo permiso para instalar aplicaciones de orígenes desconocidos que sólo autoriza a que la aplicación que descargó un APK lo pueda instalar. Así si autorizamos a Chrome a instalar archivos APK sabemos que el resto de aplicaciones no podrá hacerlo. Antes autorizábamos a cualquier aplicación instalar archivos APK.
Nuevas notificaciones de sistema permanentes
Esta es quizás la novedad más molesta de Android Oreo. Ahora veremos nuevas notificaciones permanentes nos recuerdan todo el rato cuando una aplicación se está ejecutando en segundo plano y cuando una aplicación se está mostrando sobre otras aplicaciones. Por suerte se pueden desactivar, pero están aquí para avisarnos de lo que está haciendo cada aplicación, por si detectamos que alguna aplicación está haciendo algo que no debería.
Cosas que se han quedado por el camino
Para terminar, vemos como con la versión final de Android 8.0 Oreo se han quedado dos cosas por el camino. Por un lado han eliminado la opción de borrar de golpe la caché generada por el uso de nuestras aplicaciones. Ya no hay forma de hacerlo.
Por otro lado, vemos que la opción de activar automáticamente la conexión Wi-Fi al llegar a casa se ha quedado en la versión previa de Android O, no está en la versión final, al menos de momento. Esta era otra de las novedades que más me gustaba. Habrá que esperar a ver si en próximas actualizaciones la vuelven a añadir.
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